SAP AG propone a sus clientes la disciplina ALM (Application Lifecycle Management, o Gestión del Ciclo de Vida de las Aplicaciones), la cual define todo aquello que se debe hacer para mantener la aplicación estable,  vigente y  adaptada al negocio, resguardando la inversión.

En Novis hemos sido parte del ecosistema SAP por más de 10 años y hemos notado que uno de los componentes de ALM menos observado es la Política de actualización de la solución SAP. Una actualización puede ser de diversa naturaleza: aplicación de SPS (Support Package Stack, grupo de notas que corrigen errores y optimizan performance), EhP (Enhancement Package, nuevas funcionalidades) o Upgrade de versión. ALM recomienda actualizaciones periódicas de EhP y SPS una y dos veces por año, respectivamente.

Y, ¿por qué gastar esfuerzos en estas actualizaciones? ¿Qué ganamos con ello? Podemos responder esta pregunta con el siguiente razonamiento: pequeñas actualizaciones causan pequeños impactos funcionales, que pueden ser controlados con un servicio normal de soporte funcional y mejora continua. Manteniendo la solución siempre preparada para la implementación de mejoras.

¿Qué pasa si durante un periodo considerable no se hacen las actualizaciones? El problema no solo está en el riesgo de pérdida de soporte del fabricante, en este caso SAP por obsolescencia, sino que también en el hecho de que se acumulan muchas actualizaciones pendientes, las cuales causan un impacto funcional mayor y aumentan significativamente el riesgo, generando finalmente la necesidad de abordar la actualización como un proyecto de tamaño mediano, comúnmente llamado Proyecto de Actualización.

El objetivo de  un proyecto de actualizaciónes asegurar que la solución SAP existente continúe operando sin degradarse ni presentar errores funcionales, una vez aplicada la actualización de la solución SAP. Esto se logra con un riguroso proceso de pruebas y la corrección de errores encontrados en el sistema posterior a la actualización.

En NOVIS ejecutamos permanentemente este tipo de proyectos para nuestros clientes. Por lo cual podemos ofrecer un proyecto de actualización seguro y eficiente.

Un proyecto seguro se logra con una metodología que respeta el concepto de upgrade técnico, dejando la implementación de mejoras y nuevas funcionalidades para una fase posterior, usando un ambiente de pruebas dedicado, o Sandbox, como laboratorio para medir la ventana de tiempo necesaria para salir en vivo con la aplicación, y gestionando rigurosamente la construcción y ejecución de las pruebas, como también las correcciones, con SAP Solution Manager.

La eficiencia se consigue eliminando la capacidad ociosa que se produce usualmente con la asignación full o parcial de consultores in situ para estos proyectos. Nuestro método vincula cada error encontrado en las pruebas a un único ticket de Solution Manager, el cual es resuelto en la mesa de soporte con apoyo de consultoría senior. Concluída la corrección, el consultor es liberado hasta la asignación del próximo error, cargando al proyecto solo los tiempos efectivos de trabajo, optimizando así los recursos y reduciendo el costo.

 

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